Ni bailamos ni lloramos (Mateo 11, 16-19)

Hoy las lecturas son una negrura para mi. Tampoco es que el día sea muy luminoso. Al contrario, más bien. Oscurito. Y en la oscuridad tenemos que caminar muchas veces. Sin rumbo definido, sin saber muy bien adónde, sin muchas ganas y tropezando a menudo.

Es lo que hay hoy. No hay más. Esto es la vida también. Hoy es día de replegarse y esperar. Esperar a que pase la tempestad, que pasará.

No puedo compartir mucho más. Esto es lo que presento al Señor hoy, lo que tengo.

Un abrazo fraterno

Publicado por Santi Casanova

Nacido en A Coruña. Generación del 76. Ingeniero de formación y educador de profesión y vocación. Un privilegiado.

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